El restaurante Matria, ubicado en pleno centro de Jerez de la Frontera, ofrece una experiencia gastronómica que fusiona la tradición y la innovación. Sus platos son un homenaje a la cocina materna, reinterpretados con un toque contemporáneo por Mario Pizarro, chef formado en la Escuela de Hostelería de Jerez. Desde guisos como las lentejas con manita de cerdo hasta tapas como el gazpacho al fino o el ajoblanco al amontillado, cada propuesta está diseñada para evocar sabores familiares con un giro inesperado. Esta propuesta les ha valido para ser reconocidos con un ‘Solete’ por la prestigiosa Guía Repsol.

El local, de pequeño tamaño, mezcla lo rústico con lo moderno. Las vigas antiguas del techo contrastan con una pared en rojo intenso en la zona de los baños, creando un ambiente acogedor y vibrante. Con capacidad para unos 40 comensales entre el interior y la terraza, el espacio invita a disfrutar de un desayuno reparador, una comida relajada o un tapeo informal en su barra.

La carta de Matria refleja la pasión por los productos locales y de calidad, dando una pequeña vuelta de tuerca a platos de toda la vida. Los mariscos y pescados, como el cazón en adobo tailandés o los chocos fritos con salsa tártara de kimchi, son ejemplos perfectos de cómo se reinterpreta la tradición gaditana. Además, los amantes de la carne pueden deleitarse con propuestas como la presa de castaña con patatas, mantequilla y salsa de tintilla. Para los que gustan de los guisos, encontrarán aquí lentejas de manita de cerdo con chorizo o puchero de lengua de ternera con miso y palo cortado.

Pero en Matria la experiencia no se limita a la comida. Su carta de vinos, diseñada por David Ripalda, incluye joyas de Jerez y curiosidades de otras denominaciones, haciendo que cada visita sea una oportunidad de saborear nuevos maridajes.

Puedes leer aquí un reportaje que le dedicó lavozdelsur.es.